Cuento...

En cierta ocasión
una estrella cayó a suelos humanos,
cayó sin noción de su parada
y sin conciencia de morada,
pero quedo allí…ya marcada en el mundo…

Tomó otra forma y volvió a nacer...
con el tiempo como todo, empezó a crecer
hubieron lluvias, ventiscas,
tormentas que superar,
lágrimas que aprender,
te quieros por decir,
hubieron primaveras e inviernos
y siempre continuó allí
ya de otro rostro, pero el mismo alma,
la misma estrella…

Mas con el tiempo
fue desarrollando aroma en sus manos
y en sus venas fue poblando
comprensión, cariño, nobleza…
El mundo la conoció
y en obsequio le dio desafíos que mirar
nuevas lágrimas, horizontes nuevos,
corazones que estarían cerca suyo
dispuestos a perecer por libertad,
por sueños casi olvidados…

Y así, entre batallas, sol y flores
un pobre hombre la conoció
la miró y no supo más que mirarla…
Le dijo: - Te quiero. Y ella escuchó.
Le escribió un cuento, y ella lo leyó
y allí continuó…
azares, sueños, miradas, canciones, sentires…

La estrella ya crecida siempre permaneció allí
constante, como siempre hermosa,
cada promesa se hizo fecunda
y cada pisar un hecho completo,
una verdad ya expuesta…


09-08-06